Es importante que se establezca cinco tiempos de alimentación entre
meriendas y comidas principales para mantener la energía a lo largo del día y no
sentir la sensación de ansiedad y hambre sobre todo si lo que se desea es
mantener nuestro peso.
El desayuno es la comida más importante del día pero esto no implica
que se deba ingerir en cantidades
abundantes debe priorizarse la calidad de los alimentos sobre la cantidad de
los mismos. Para esta comida el cereal no debe de faltar, pero en pequeñas
cantidades, acompañado de queso fresco o huevo, productos como la mantequilla, el queso crema y azucarados son los que están de más.
Para el almuerzo trata de elaborar un plato saludable que incluya
vegetales en su mayoría, un trozo pequeño de carne o pollo y un cuarto de plato
de harinas, ya sea arroz con frijoles o la combinación que se desee.
Para la cena, es importante servirse en un plato pequeño, pues se
requiere menos energía a esas horas, sin embargo, es vital no saltarse este
tiempo de alimentación porque además de requerirlo, al otro día tendrá mucha
hambre y consumirá más de lo debido.
No olvides incluir entre las comidas principales meriendas ya que sirven
para no llegar con tanta hambre a la comida fuerte donde se corre el riesgo de
un consumo excesivo. Por ejemplo en vez de de comer muchas frutas en el desayuno,
es mejor distribuirlas a lo largo de la mañana son fáciles de transportar, nos
hidratan y nos dan energía para nuestras actividades de todo el día.
Para las meriendas por las tardes más conocidas como el cafecito o el
lonche es suficiente un té o un café con muy poco azúcar, acompañado de
galletas integrales que no sean rellenas ni azucaradas, yogurt o fruta.
Te gusto el artículo?, entonces no olvides suscribirte a nuestro Boletín Quemacalorias! únete y recibirás todos nuestros consejos en tu e-mail totalmente gratis!
Vía: http://quemacalorias.blogspot.com **Recuerda siempre que conviene consultar a un especialista (médico o nutricionista) cada ves que empezamos alguna dieta.